Pestañas XXL a lo Kim Kardashian, ¿Es posible?
Famosas que aparecen en redes sociales y revistas de moda con pestañas infinitas. Pero, ¿Qué truco esconden? La respuesta es sencilla, pestañas postizas, o incluso con extensiones.
Es cierto, que de forma eventual puede resultar divertido colocarte unas maxipestañas y crear un make up a lo “it girl americana” pero el día a día, es otra cosa.
Si optas por la naturalidad, apunta estos sencillos trucos y reaviva tu mirada en menos de un mes:
1# Masajes con aceite
Puedes utilizar el aceite de coco, almendras o aceite de oliva virgen extra. Realiza un suave masaje en las pestañas cada noche. Después retira el exceso. Con este proceso estimularás el crecimiento de las pestañas.
2# Té Verde
Debes hacer una infusión de té verde. Luego, moja un disco de algodón y colócalo en tus pestañas durante 5 minutos. A continuación, enjuágate los ojos suavemente con agua. Este tratamiento hay que realizarlo todos los días durante al menos, 3 meses.
Como el té verde tiene propiedades antioxidantes y vitaminas del complejo B, fortalecen las pestañas y ayudan a que crezcan más rápido.
3#Vaselina
Otro truquito es cepillar las pestañas cuidadosamente con vaselina. Aplíca este producto con la ayuda de un cepillo para pestañas y deja que actúe toda la noche. Por la mañana lávate cuidadosamente con agua. Se hidratarán por completo en cuestión de semanas y se verán mucho más brillantes.
4# Cosmética
Existen bálsamos reparadores de pestañas que nutren y activan el crecimiento natural. Es una opción que sigue siendo bastante económica y un poco más cómoda y efectiva. Sobre todo si abusas del rizador o te has realizado una permanente de pestañas recientemente.
5# La dieta
De la misma forma que una alimentación inadecuada influye en el crecimiento del cabello, también tiene efecto sobre las pestañas.
Apunta estos nutrientes, serán tus mejores aliados:
- Antioxidantes: Aguacate, germen de trigo, aceite de oliva, cítricos y frutos del bosque, y vegetales de oja verde en general.
- Biotina o vitamina H: Lo contienen la yema de huevo, la coliflor y algunas frutas como las fresas, las frambuesas y el plátano.
- Omega 3: Las famosas semillas de chía y linaza, los frutos secos y el pescado azul.
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