La firma FTL Moda, lleva apostando varias temporadas por mujeres muy alejadas del conocido canon 90-60-90.
En 2015, la marca hizo desfilar a Madeline Stuart, una joven australiana con síndrome de down cuyo sueño había sido ser modelo. Un año más tarde, subió a la misma pasarela una vendedora de automóviles de Nueva Jersey, llamada Rebekah Marine, la cual carece de antebrazo desde su nacimiento.
La protagonista este año es, Reshma Qureshi. Una joven de 19 años, víctima de un ataque de ácido sulfúrico por parte de su excuñado. Fué una venganza con motivo de la separación de su hermana con el maltratador. Como consecuencia, perdió el ojo izquierdo, el derecho lo tiene parcialmente cerrado, y sufre constantes infecciones, además, de unas cicatrices que le desfiguran el rostro.
Reshma ha alcanzado la fama internacional con sus tutoriales de belleza no convencionales en la plataforma de Youtube. Donde, además, denuncia la facilidad con la que se puede acceder a la sustancia y pide firmas para que se endurezcan las penas y se dificulte su venta. La campaña se llama #EndAcidSale
En sus tutoriales afirma “Se puede comprar un lápiz de labios en el supermercado con la misma facilidad que el ácido”, sostiene la activista, ya que el precio al que se obtiene ronda los 40 céntimos de euro.
Este desfile, no sólo ha significado moda. Para Reshma, es una forma más de lucha. La joven representa una lacra que sufren miles de mujeres indias. Se ha convertido en una de las figuras más visibles de su país contra la violencia machista.
La activista forma parte de una ONG llamada Make Love Not Scars (haz el amor, no cicatrices). Una organización que apoya a las víctimas de este tipo de ataques. Ofrecen apoyo psicológico y laboral y, además, prestan ayudas económicas para sus tratamientos.
A la vez que se celebaba el desfile, un tribunal Indio, establecía una condena de pena de muerte a un hombre de 26 años por el asesinato de una mujer de 2 años menor. El varón arrojó ácido al rostro de la joven causandole la muerte. Esta sentencia marca un hito por ser la primera en este tipo de casos.
Reshma fue la estrella del desfile de Archana Kochhar ( una diseñadora india).
Accedía a la pasarela con un espectacular vestido blanco de estampado étnico que realzaba su elegante figura. En los labios lucía un rojo carmesí.
Como guinda, lució un tocado-joya muy elaborado combinado con un moño bajo que recogía su negra melena.
“No podía soportar mirarme al espejo”
“Odiaba que se me acercase cualquier persona. Traté de suicidarme varias veces. No podía soportar mirarme en el espejo”. Estas fueron sus palabras en una entrevista para Hindustan Times. Ahora, Reshma se presenta como una superviviente y no una víctima, una mujer fuerte que nos da una lección de vida.
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