¿Sientes que tu piel necesita una limpieza de cutis? Porque seamos sinceras, tú te mereces tener una piel luminosa y suave así que no esperes más y sigue leyendo para descubrir cómo se hace una limpieza de cutis paso a paso.

Beneficios de la limpieza de cutis

No necesitarás más de media hora y tus beneficios serán notables al instante. Por ejemplo, notarás tu piel más suave, oxigenada y luminosa. Algo imprescindible en cualquier momento del año ya que bien sea frío o calor, tu piel se resiente constantemente a los cambios de temperatura.

Y no solo eso, la contaminación también es un gran enemigo al que debes hacer frente realizándote una limpieza semanalmente.

Limpieza de cutis paso a paso

Imprescindible, desmaquíllate como si no hubiese un mañana. No hay nada peor para la piel que irte a dormir con el maquillaje puesto. Hay que evitarlo de todas todas, por más cansadas que estemos, por más que la cama nos llame, por más que nada, antes de poner un pie en la cama, tenemos que eliminar cualquier rastro de suciedad en la cara.

Para ello, elige el producto más adecuado para tu piel grasa, mixta, normal o seca. Puedes escoger entre agua micelar, pastillas limpiadoras, gel, jabón líquido o leche desmaquillante, y en todos los casos, empapa un disco de algodón  y retira a conciencia, pero con cabeza, el maquillaje. Únicamente en caso de que hayas utilizado leche desmaquillante, aplica posteriormente un tónico para reequilibrar el pH de la misma manera, empapando un disco de algodón.

Una vez superado el primer paso vamos a por el segundo, por lo que ahora sí, toca limpiar la piel en profundidad, o lo que es lo mismo, exfoliar el rostro.

Para este paso hay un secreto y no es otro que utilizar productos que intensifiquen la acción purificante del desmaquillado. Para ello, podemos echar mano, por ejemplo, de las mascarillas porque combinan la limpieza con el cuidado del cutis. También resulta igual de efectivo aplicar un exfoliante.

¿Cómo hacerlo?, fácil, tienes que tener el cutis ligeramente húmedo, a continuación, bajando desde la frente hasta el contorno de la cara, e incluyendo la nariz, pómulos y barbilla, aplica pequeñas cantidades de exfoliante. Esto se hace restregando el producto en movimientos circulares y presionando suavemente todas las zonas.

Ahora viene uno de esos momentos maravillosos que nos brinda el tratamiento. Se trata de los baños de vapor. ¿Para qué se hacen?, para abrir los poros facilitando así su limpieza, y, ¿cómo se hace?, hierve agua y cuando la veas burbujeante acerca tu rostro hasta una distancia aproximada de 30 centímetros y al mismo tiempo, recubre tu cabeza con una toalla para no dejar escapar el vapor. Sentirás como se abren los poros, mejora la circulación y en general, notarás la piel mucho más relajada.

Diez minutos después ya estás lista para limpiar manualmente los puntos negros y granitos. Nosotros te aconsejamos que envuelvas los dedos con gasas porque éstas ya están desinfectadas y seguramente no provocarás heridas innecesarias en el rostro.

Una vez hayas finalizado, aplica el tónico con un algodón. Gracias a él eliminarás cualquier impureza que aún permanezca en el rostro y al mismo tiempo se cerrarán los poros completamente logrando resguardar tu piel.

El último paso no es otro que la hidratación. Un paso indispensable si queremos lograr una limpieza de cutis perfecta. Además, no solo aplicaremos la crema hidratante por la noche, también deberíamos hacerlo por la mañana, así lograremos disfrutar siempre de una sensación de frescor y protección.

Y como la constancia es una virtud, no dejéis de realizaros esta limpieza semanalmente, gracias a ello lucirás un rostro hidratado, fresco y luminoso diariamente.

¿Cada cuánto tiempo hay que hacerse una limpieza de cutis?

El tiempo depende de mil factores, pero sobre todo depende de tu estilo de vida y de tus hábitos. No es lo mismo estar expuesto a un lugar lleno de suciedad y polución que estar en un espacio natural sin contaminantes. En ambos casos es necesaria una higiene, pero evidentemente en el primer caso se repetirá más asiduamente ya que la piel sufrirá mucho más.

¿Pero por qué sufrirá más? La polución con la que convivimos diariamente queda impregnada en la piel creándose una capa tras otra, al final, esta dura capa impide que las células de la piel respiren con normalidad.

En general, podemos decir que se recomienda realizar una limpieza de cutis con el cambio de cada estación, es decir, cuatro al año, pero como ya hemos visto, dependerá de cada persona. Eso no quiere decir que solo os hagáis cuatro, podéis haceros más sin ningún problema. Además, no solo depende del medio ambiente, también depende de tu tipo de piel. Una piel seca o madura, o ambas cosas también deberá realizarse más asiduamente la limpieza, por ejemplo, cada seis semanas, sí, como habéis leído. Y si ya se tiene tendencia a tener acné, la limpieza se realizará más a menudo.

¿Cómo puedo saber si mi piel está sucia?

Es muy fácil. Para saber si necesitas una limpieza de cutis basta con que te fijes en si tienes una mayor concentración de puntos negros en la piel y en si te aparecen granitos con más frecuencia. Asimismo, si el tono de tu piel está apagado (en lugar de sonrosado y brillante), necesitas una limpieza facial profesional para eliminar toxinas, reducir las terribles espinillas y el acné (menos poros obstruidos), para mejorar la circulación de la cara y para ganar tersura y elasticidad, al ejercitar los músculos faciales.

¿Debo realizarme una limpieza de cutis si no me maquillo?

Incluso aunque no te maquilles, es necesario limpiar la piel a diario para eliminar restos de la crema hidratante, el polvo y la contaminación de la calle que ensucia y obstruye los poros del rostro.

El maquillaje ensucia más, lógicamente, pero no es el único factor a tener en cuenta. Así que tanto si te maquillas como si no, deberías pasarte por Vanitas Espai de un momento a otro.

Tras estos siete pasos, el rostro vuelve a estar lleno de luz, de vida y de belleza natural. Por lo que el antes y el después de la limpieza facial profesional es más que evidente. Ya verás que cuando lo pruebes notarás la diferencia y entenderás por qué le damos “tanto bombo” a este tratamiento facial.

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