El verano se traduce en calor, y esto afecta a nuestro cuerpo. El sudor se hace inevitable y eso significa liberar un olor corporal más fuerte.
La solución a esos olores desagradables en el transporte público, en los vestuarios de tu gimnasio o el que desprende tu compañero de trabajo que inexplicablemente suda hasta con el aire acondicionado de la oficina, podría limitarse con un chorrito de un nuevo perfume creado por científicos de la Universidad Queen de Belfast.
De acuerdo con un reciente estudio publicado en la revista Chemical Communications , el perfume, contiene, entre otros elementos, una “fragancia en bruto” a la que se asocia con un “líquido iónico inodoro” (sales en forma líquida) capaz de producir un perfume que huele mejor cuanto más se suda.
Las glándulas sudoríparas apocrinas ubicadas en axilas, ingles y pubis emanan un líquido viscoso, compuesto por agua, feromonas, lípidos y residuos metabólicos. Este fluido realmente no tiene un olor muy fuerte (aunque depende de cada uno) pero cuando toma contacto con las bacterias que se encuentran en la piel, es su descomposición la que desprende un olor desagradable.
Además hay desencadenantes tales como hacer ejercicio y las emociones fuertes que pueden causar que estas glándulas segreguen sudor, especialmente en condiciones cálidas y húmedas. Esto hace que la axila sea el ambiente perfecto para que las bacterias prosperen y creen esos malos olores.
Por lo tanto, tres investigadores de la Queen’s University de Belfast, Irlanda del Norte, afirmaron tener la clave. Han descubierto un perfume que libera una cantidad de aroma en función de la humedad a la que está expuesto.
De manera momentánea ha sido bautizado como “Líquido Iónico Perfumado“. Actúa de manera reactiva al agua y por lo tanto al sudor.
Además tiene el poder de neutralizar el mal olor del sudor para que la mezcla del sudor y del perfume no resulte desastrosa.
Trabaja de la siguiente manera; el Tiol, que es un compuesto orgánico responsable del mal olor del sudor, es atraído por el líquido iónico al que se adhiere, perdiendo su potencia.
Los investigadores creen que este avance podría tener un sinfín de posibilidades comerciales, tales como el desarrollo de productos para la higiene personal.
Esta nueva fragancia también podría tener el potencial para ayudar al tres por ciento de la población mundial que sufre hiperhidrosis (sudoración excesiva y de manera impredecible). Los pacientes afectados tienden a sudar, incluso en temperaturas frías. El avance puede llegar a ser un tratamiento que impide la estimulación de las glándulas sudoríparas para estos pacientes.
Actualmente, los investigadores trabajan con una empresa de desarrollo de perfumes de venta al público, y se espera que pronto pueda estar a cualquier alcance.
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